Junto con los espectaculares monumentos modernistas, el barrio Gòtic (o Gótico) es uno de esos lugares mágicos y llenos de encanto que no hay que dejar de admirar. Pasear por sus calles ensortijadas implica empaparse de la historia de Barcelona, pero también de sus leyendas y hechos insólitos que, muchas veces, ni sus propios habitantes conocen.
Quienes trabajamos en Lugaris no sólo nos esforzamos por ofrecerte los mejores apartamentos de alquiler en Barcelona para tus vacaciones: también queremos ayudarte a sacar el máximo partido a tu paso por la capital catalana. Por eso, hoy queremos compartir contigo algunos de los secretos del barrio Gótico más sorprendentes y que, sin duda, harán que mires el casco antiguo de Barcelona con otros ojos.
Estamos seguros de que muchos de ellos te dejarán sin palabras. ¿Te atreves a conocerlos?
LA SINAGOGA MAYOR: UNA DE LAS MÁS ANTIGUAS DE EUROPA
Uno de los rincones más singulares del barrio Gótico es el barrio judío o Call, en el que vivió la comunidad hebrea de Barcelona hasta finales del siglo XV, cuando se decretó su expulsión. Pese a sus reducidas dimensiones, llegó a contar con cinco sinagogas en la Edad Media, de las cuales sólo se conserva una: la Sinagoga Mayor. Ubicada en la calle de Marlet, número 5, puede presumir de ser una de las sinagogas más antiguas de Europa (pese a estar documentada desde el siglo VIII, los trabajos arqueológicos la sitúan en el siglo III de nuestra era, en plena época romana).
Quienes lo deseen pueden visitarla de lunes a viernes todo el día (hasta las 18:00 h o 18:30 h, dependiendo de la temporada), y los fines de semana, únicamente por la mañana.
UNA CASA HABITADA DESDE HACE CASI MIL AÑOS
¿Le has preguntado alguna vez a algún conocido cuántos años tiene la finca en la que vive? Pues bien: si haces la prueba con determinados vecinos del Call, la respuesta puede dejarte helado/a. Sin ir más lejos, en el número 6 de la calle de Sant Domènec del Call se halla la casa habitada más antigua de Barcelona. Se sabe que éste, uno de los edificios medievales de Barcelona menos conocidos, ha servido como vivienda por lo menos desde el siglo XII , que acogió un prostíbulo durante la posguerra y que en el año 2000 fue reformado para servir de domicilio privado. Incluso, esta construcción casi milenaria logró sobrevivir al grave terremoto de 1428, que inclinó su fachada.
Definitivamente, nuestros apartamentos en Barcelona son muchísimo más modernos, para que encuentres en ellos el descanso que necesitas.
EL MISTERIO DE LOS BAÑOS JUDÍOS DE BARCELONA
Uno de los grandes enigmas del Call es el emplazamiento exacto de los antiguos baños judíos o mikvé. Algunas guías turísticas aseguran que los baños rituales para hombres se hallaban en el interior de un edificio que hoy da cabida a una tienda de decoración, S’Oliver, en la calle de Banys Nous, 10. Sin embargo, lo cierto es que el tipo de ladrillo empleado corresponde al siglo XIX, aunque no se descarta que el sótano de este establecimiento pueda dar cabida a restos anteriores.
Otro tanto ocurre con los supuestos baños femeninos, a los que algunos ubican en el sótano de la cafetería Caelum (C/ Palla, 8). También en este caso, la arquitectura es típica del siglo XIX, a lo que se suma el hecho que el local esté fuera de los límites del Call. Eso sí: si adoras los dulces, allí podrás saborear deliciosas especialidades de repostería en un marco único.
Lo que sí es seguro que, en el cruce de las calles de Banys Nous, Boqueria, Avinyó y Call, se construyeron los baños públicos de Barcelona en el siglo XII.
LA IGLESIA MÁS ANTIGUA DE BARCELONA
Fuera del barrio judío, el Gótico sigue cautivando al viajero con su cautivadora arquitectura. Por ejemplo, en la plaza de Sant Just, encontramos la basílica de los Sants Màrtirs Just i Pastor. Algunos hallazgos arqueológicos recientes han permitido conocer el origen de esta iglesia, que ha acogido el culto cristiano ininterrumpidamente desde el siglo IV. De ahí que sea la iglesia más antigua de Barcelona.
La basílica actual, de estilo gótico, es del siglo XIV y se alza en el mismo enclave donde una vez hubo una construcción románica y una basílica visigótica del siglo VI. Y un detalle que merece la pena subrayar: desde 1989, se celebra en su interior una comida de Navidad para las personas más necesitadas de la ciudad.
LA CASA DEL VERDUGO DE BARCELONA
La figura del verdugo ha sido una de las más odiadas en la historia de Barcelona, hasta el punto de que nadie quería tener como vecino a la persona que desempeñaba este sórdido oficio. Para solucionar esta circunstancia, el antiguo órgano de gobierno conocido como Consell de Cent decidió asignarle una vivienda en la plaza del Rei, siendo ésta la casa más pequeña de toda Barcelona. Además, era en este espacio donde se ejecutaban las penas de muerte, por lo que el verdugo (o botxí, en catalán) evitaba así tener que pasearse por las calles de Barcelona.
En la foto, se ve la antigua casa, sita en el espacio que hoy ocupa el Museo de Historia de Barcelona (MUHBA). Al lado, se aprecia una de las columnas del antiguo templo romano de Augusto, que hoy se encuentra junto a los restos de esta construcción en el número 10 de la calle del Paradís.
UNA COLONIA ROMANA DE RICOS
Ya que acabamos de hablar del emperador, no está de más decir que la antigua colonia romana de Barcino, en el actual barrio Gótico, fue una ciudad en la que el lujo era la tónica predominante. En efecto, los historiadores se hallan intrigados ante la abundancia de libertos (esclavos que habían comprado su libertad) y ostentosas domūs o casas (como las de las calles de Avinyó o de la Fruita), algunas con mármol de Carrara; la presencia de tres baños públicos (como los de la calle de Regomir), en un núcleo urbano que no sobrepasaba los 5.000 habitantes… Incluso, fuera de las murallas, se levantaban villas romanas casi tan grandes como la propia Barcino, siendo la de la Sagrera el mejor ejemplo. Y eso no es todo: algunos arqueólogos sospechan que, debajo de la actual basílica Santa María del Mar, pudo haber un anfiteatro romano. El nombre de la iglesia que se hallaba allí anteriormente, Santa María de las Arenas, en el Born, contribuye a alimentar esta teoría.
EL BARRIO GÓTICO NO EXISTE
No, no es una broma (o al menos, no del todo): hemos querido dejar la revelación más desconcertante para el final. Pese a que las calles del centro histórico de Barcelona tienen más de dos milenios a sus espaldas, la mayoría de sus construcciones actuales no son góticas, sino neogóticas, ya que datan de final del siglo XIX y principios del XX.
¿Reconoces el edificio de la foto? Aunque parezca increíble, éste era el aspecto que presentaba la catedral de Barcelona en 1880. Aunque su nave interior sí es medieval (se inició en 1298), su imponente fachada es mucho más reciente.
Tampoco es gótica la inspiradora plaza de Sant Felip Neri, en el Call, que tuvo que ser reconstruida tras la Guerra Civil. Y lo mismo ocurre con el espectacular puente que preside la angosta calle del Bisbe. Aunque también parece gótico, fue construido en el año 1928 por Joan Rubió i Bellver —atención a la calavera con un puñal que se ve al pasar por debajo— con motivo de la Exposición Internacional, que se celebraría un año después. De todos modos, esto no le resta un ápice de su magnetismo, ¿verdad?
¿Qué te ha parecido? ¿Conoces otros secretos de Barcelona y su barrio Gótico? Si es así, nos gustará conocerlos. ¡Envíanos tu comentario y sorpréndenos!
Muchas veces pasamos por alto algunos edificios importantes, el barrio Gótico es para perderse. Me encanta saber la historia de los distintos lugares de Barcelona, y sin duda este barrio tiene muchísimas. Mañana vamos a visitar los baños.
¡Muchas gracias!